lunes, 2 de junio de 2008

FCH: 18 meses

Sociedad abierta
ERNESTO REYES
Este martes 3 de junio está programada una visita más de Felipe Calderón al estado de Oaxaca. Salvo en medios gubernamentales donde hay premura para recibirlo, en el grueso de la población poco se conoce de los beneficios que signifique la presencia presidencial.
Por algo ha de ser que según la percepción de la gente, 18 meses después de comenzada su gestión, hay pocos datos positivos sobre su desempeño.
La evaluación trimestral más reciente de Roy Campos, a través de CONSULTA MITOFSKY, no arroja muy buenas cuentas para Felipe Calderón, porque hacia el 31 de mayo de 2008, cuando se cumple la cuarta parte de la duración total de su gestión, existen algunos eventos relevantes que inciden en la opinión pública, como por ejemplo:
a) Un recrudecimiento de la violencia asociada al combate del Estado al crimen organizado.
b) Un incremento en el precio del los alimentos que motiva un programa emergente de apoyos anunciado por el Presidente.
c) El debate sobre la reforma petrolera ( que por ciertas percepciones, lo van ganando los opositores a dicha reforma).
Los resultados de una encuesta levantada los días 22 y 23 de mayo pasados, a lo largo del 6to trimestre a 3,000 mexicanos utilizando el llamado TRACKING POLL ROY CAMPOS – una herramienta de medición para generar los indicadores de coyuntura que se precisan en la metodología respectiva- establece lo siguiente:
En la economía:
La percepción ciudadana sobre la economía es hoy la peor que se ha registrado no sólo en lo que va del sexenio sino en cualquier mes de mayo en los últimos ocho años. El porcentaje de quienes la ven positiva apenas alcanza el 26 por ciento, nunca tan baja en esta serie.
Para sosiego del grupo gobernante, el análisis comparativo arroja que justo al concluir el 6to trimestre del sexenio de Vicente Fox, la economía tampoco era evaluada positivamente (en ese momento fue efecto de las tarifas eléctricas), pero superior ligeramente a la que hoy se ve ya que 70 por ciento la veía mal y hoy ese porcentaje llega a 72 por ciento.
Como es tradicional, las mujeres, son las que peor perciben a la economía, lo mismo que ocurre con los adultos mayores y con la población de menor nivel educativo y de ingreso.
Donde el diferencial es claro es en la zona rural donde solamente 19 por ciento ve bien a la economía, cuando hace un año estos ciudadanos opinaban de manera muy similar a los ciudadanos urbanos. Por regiones, en el norte es donde mejor opinión tienen y el centro del país donde más negativos se muestran.
La expectativa para el próximo año tampoco es positiva, 29 por ciento cree que mejorará y 66 por ciento que empeorará.
Particularmente se preguntó en esta ocasión sobre la expectativa de precios, y 53 por ciento consideró que habrá grandes incrementos de precios y sólo 13 por ciento considera que los aumentos serán pocos o nulos
“Entre la inseguridad y la economía, los mexicanos estamos más preocupados por los aspectos económicos”, afirma Campos en su evaluación.
A pesar de las noticias sobre inseguridad, la mención a esta como principal problema no sólo disminuyó sino que es la más baja en los meses de mayo de los últimos cuatro años, y ello debido al incremento continuo de la percepción de “crisis económica”.
En tercer lugar, después de la inseguridad, se mantiene el desempleo y destaca el porcentaje de respuestas a “inflación”, que aunque en 8vo lugar, obtiene su mayor valor en siete años
De los seis trimestres de la gestión presidencial a partir del tercero ya la economía rebasaba a la inseguridad, la cual, paradójicamente, obtiene sus menores niveles en este momento cuando las noticias diarias muestran un ambiente de violencia en varias ciudades.
En la zona rural, el desempleo y la pobreza son percibidas como problemas mayores a la inseguridad, en cambio sigue destacando el norte, con mejor situación económica, que menciona a la inseguridad y al narcotráfico como problemas más fuertes que los económicos.
En general la mención de problemas económicos subió de 57 por ciento a 59 por ciento y las de seguridad/justicia bajó de 37 por ciento a 34 por ciento.
A pesar de los problemas, el Presidente Calderón logra mantener su porcentaje de aprobación en 61 por ciento, mismo valor obtenido en el trimestre anterior y 4 puntos menos que el de hace un año, la calificación asociada se mantiene en los mismos niveles alcanzando 6.8.
Donde se observa una disminución es al comparar su aprobación en mayo de 2008 respecto a mayo de 2007, periodo en el que se pierden cuatro puntos porcentuales generados por la baja en la aprobación en el sureste y en la población de nivel socioeconómico alto que hace un año lo apoyaba muy fuertemente.
El centro del país, quien se caracteriza por presencia opositora y por pesimismo económico, también es la región que evalúa más bajo al presidente Calderón. En el único grupo en el que su aprobación sube, es en el de los ciudadanos habitantes en el norte del país.
Por nivel de autoridad, se mantienen los gobernadores como la autoridad mejor evaluada al lograr la aprobación de tres de cada cuatro de sus gobernados y se observa un incremento de los presidentes municipales de 60 a 65 por ciento, que rebasan al Presidente de la República con quien se han alternado el segundo lugar desde el tercer trimestre.
Al clasificar a los 32 gobernadores según el principal partido que los postuló, el PRI se mantiene en promedio arriba del resto al alcanzar el 81 por ciento seguido del PRD y del PAN que se mantienen abajo del 70 por ciento.
Donde el Presidente Calderón sí sufre disminuciones respecto al pasado trimestre es en la forma en se evalúa su trabajo particular por áreas de gobierno.
La salud, el combate a la delincuencia y la educación siguen siendo los aspectos donde más se le reconoce haber trabajado, en cambio el combate a la inflación y la pobreza no logran posicionarse como áreas de fuerte trabajo. En general se observa una baja en prácticamente todos los rubros (excepto la atención a la salud) destacando la disminución en las respuestas para combate a la inflación, respeto a la ley y fortalecer la democracia.
Otra variable donde hay una baja en la evaluación a Calderón, es en la expectativa que genera hacia el fin de su sexenio. En febrero pasado 42 por ciento poseía una perspectiva positiva y 20 por ciento una negativa. Hoy, esa relación se modifica a 34%/24%.
Se ha superado el problema del incremento a las gasolinas anunciado en septiembre, sin embargo hoy el ambiente de incertidumbre económica vuelve a estar presente y afecta las percepciones generales, aunque en esta ocasión el problema sea de carácter global y nuestro gobierno no sea totalmente responsable, dice Roy en las conclusiones del trabajo.
Felipe Calderón logra mantener los niveles de apoyo con los anuncios alrededor del combate a la inseguridad y de apoyo a los más afectados por los incrementos de precios, pero el pesimismo hace que bajen las perspectivas sobre la forma en que finalizará el sexenio.
Bajo estas expectativas no muy halagadoras, Calderón estará mañana en tierra del oscurantismo, donde su presencia se contamina al juntarse con personajes muy mal calificados por la población, lo cual hace dudar sobre la sinceridad de sus palabras cuando fuera candidato presidencial en el sentido de que no iba a gobernar con corruptos y mentirosos. Una raya más a su cuenta.
Contactos: Ernesto_reyes_647@hotmail.com
tandemmedios@hotmail.com
ernestreyes@prodigy.net.mx